El Instituto Tecnológico de Galicia (ITG) pone a disposición del sector de la eólica marina su capacidad como único Centro Tecnológico gallego con reconocimiento estatal de excelencia investigadora Cervera en Transición Energética y su experiencia en el desarrollo de sistemas de control centralizado para gestionar, de forma óptima, infraestructuras de generación energética renovable mediante la digitalización y supervisión inteligente de la energía.
La tecnología de eólica marina flotante permite llegar a los 15 megavatios de potencia generada, respecto a los 6 que puede generar la eólica en tierra.
Más de 150 profesionales asistieron a esta jornada con empresas y entidades relevantes de la eólica marina nacional e internacional, con proyectos y experiencia en el sector, donde se analizaron las oportunidades que presenta esta industria para la economía gallega. VER PROGRAMA
El director de la División de Energía de ITG, Santiago Rodríguez Charlón, señala que “el futuro de la energía eólica pasa por el mar y, en concreto, en aguas profundas, como es el caso de España y Galicia con uno de los mayores potenciales de aprovechamiento de recurso eólico. Así, la eólica marina flotante tiene un elevado potencial a corto plazo porque se adapta muy bien a las características de la plataforma continental española, no produce polución acústica ni distorsiona el paisaje si se ubica alejada de la costa”.
Y es que frente a la eólica fija anclada al fondo, en la flotante el viento es más regular y tiene una mayor velocidad con menores turbulencias, lo que permite una altura de torre menor para la misma potencia y dimensiones que la instalada en tierra. Además, la tecnología de eólica marina flotante permite llegar a los 15 megavatios de potencia generada, respecto a los 6 que puede generar la eólica en tierra. Estas son algunas de las ventajas señaladas esta mañana por los participantes en la jornada sobre eólica marina organizada por ITG, en la que se abordaron los retos técnicos, contractuales y legales de esta industria.
Si bien actualmente la inmensa mayoría de los parques eólicos marinos comerciales en el mundo son fijos, ya es posible aprovechar de manera óptima el potencial eólico de las localizaciones en el mar. En este sentido, uno de los retos que presenta este sector es avanzar en la gestión inteligente de la energía producida por estas infraestructuras.
La jornada
En la jornada, organizada por ITG en colaboración con el Club de Derecho de Construcción e Ingeniería (CDCI) con el patrocinio de Quantum Global Solutions, Driver Trett y Pérez-Llorca, el presidente de ITG, Antonio Couceiro, destacó que “la energía de origen marino se postula como una de las palancas para la transformación energética a medio y largo plazo a nivel nacional, europeo y global, a la vez que una oportunidad industrial, económica y social para nuestro país, de forma coherente y compatible con la protección de los valores ambientales y el resto de usos y actividades del entorno marino”.
Por su parte, Santiago Rodríguez Charlón, director de la División de Energía de ITG y moderador de la primera mesa, señaló que la eólica marina flotante “es una tecnología que ya existe en Viana do Castelo, en Portugal, y en la que Galicia tiene un enorme potencial industrial. Los proyectos presentados al Ministerio para la Transición Ecológica sitúan a Galicia al frente del ranking español en tramitación de parques eólicos marinos y supondrían aproximadamente el 9% de toda la eólica marina instalada actualmente en el mundo. En tres años veremos una explosión de proyectos”.
En el evento, que reunió a algunos de los actores nacionales e internacionales más relevantes en este ámbito participaron Luis Velasco, director de Tramitaciones y Medioambiente en Red Eléctrica de España (REE) y Juan Rodríguez Fernández-Arroyo, director de Enerxía de INEGA de la Xunta de Galicia.
Asimismo, en el transcurso de la mañana tuvieron lugar tres mesas redondas que contaron con algunas de las empresas y entidades más relevantes de la eólica marina nacional e internacional. Así, en el panel sobre las oportunidades y desafíos técnicos para la industria participaron Ángel Fernández Rodríguez, Competitive Strategy and Commercial Manager en Navantia Seanergies; Raúl Martín Valencia, Head of Offshore Wind en Greenalia; Jorge Porres, Director Technology and Supply Chain en BlueFloat Energy y Jaime Moreu, CEO en Brezo Energy Marine Contractor, que analizaron qué áreas necesitan un mayor desarrollo tecnológico y cuáles son los retos específicos de aspectos como la evacuación de energía, la integración en la red eléctrica, la ingeniería de las plataformas flotantes o la fiabilidad y predictibilidad de las inversiones necesarias.
En la mesa sobre los desafíos contractuales y regulatorios en proyectos de eólica marina en España, moderada por Javier Sánchez, director de Diales y miembro Junta Directiva del Club de Derecho de Construcción e Ingeniería (CDCI), Álvaro del Palacio, Managing Director en Ferrovial Offshore Wind; Ana Cremades, socia en Pérez-Llorca; Roberto Bouzas Saavedra, director general en Nervión Naval Offshore y Pablo Alcón Valero, Offshore Director en Capital Energy abordaron el tipo de relaciones y riesgos que se plantean entre las partes, el esquema preferido de relaciones contractuales en el sector, así como las áreas grises que se han detectado en los proyectos en España.
La jornada finalizó con una mesa internacional en la que se expusieron las experiencias de proyectos en otros países, incidiendo en los problemas surgidos y cómo se han resuelto las disputas; problemas de ejecución; las causas de posibles disputas en este tipo de proyectos y cuál es la mejor forma de prevenirlas y resolverlas. Moderada por Óscar Martínez, director de Quantum Global y Presidente de CDCI, participaron Keith Daly, director en Quantum Energyen Reino Unido; Christian Knuetel, abogado en Hoggan Lovells (Alemania); Timo Zinnel, Associate Directoren Driver Trett (Alemania) e Ian Stout, Managing Director en Lisarb Energy (Reino Unido).